viernes, 27 de marzo de 2020

Columna: Aburrimiento

*Antes que nada, estimados lectores de este blog, me interesa comentarles que a partir de la fecha, y de modo irregular, seguramente, iré colgando estos textos sueltos en formato de columna, con mis opiniones sobre algún tema en particular que me interese. 

Inauguro esta suerte de sección del blog, con el tema nombrado con el título Aburrimiento. 

Intentaré dar mis puntos de vista sobre algún tema buscando fundar dichas ideas, lo más que me sea posible, a fin de que no sean simples palabras tiradas al viento, o la red, en este caso. 

La imagen que elegí para ilustrar el texto tiene que ver con uno de mis pasatiempos favoritos, como lo es la fotografía. Y la fotografía de lugares y paisajes, una forma de que el aburrimiento tenga un sendero lúdico por donde dejar sus huellas, un medio de que la vida me permita sentirme lúcido. 
Marzo 2020
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Aburrimiento



Hace unos minutos me encontré con la palabra aburrimiento, con algunas opiniones sobre ella. Y pensé en escribir algo sobre cómo veo yo al aburrimiento.

Registro fotográfico realizado por Walter Rotela

Cuando pienso, en general, sobre esa palabra y lo que significa para mí, vienen a mi mente imágenes de mi niñez. Sí, cuando me aburría en esos tiempos inventaba grandes o pequeñas historias, de la mano de mis juguetes y de otros artefactos, como un trozo de madera -que hacía las veces de espada-, una olla vieja -que se convertía en casco -, en fin, en esos tiempos... cualquier implemento me servía para crear una historia, que contaba a mis padres, a mis amigos de juego o a los vecinos. Y todo partía de estar aburrido. Hoy, con algunos años más, cuando estoy aburrido sigo creando historias de ficción.

La ficción me permite crear otras posibilidades de mi mundo inmediato, de mis circunstancias. Puedo crear, entonces, otras posibilidades, otras conclusiones, otras formas de ver. Como cuando un científico usa sus fórmulas para crear posibilidades para sus teorías. Algunas se prueban más adelante, otras no, pero surgen de crear esas otras posibilidades que aún no conocemos. Eso es justamente lo que permite crear ficciones: Crear posibilidades.

Si todo lo tengo resuelto, si todo está perfectamente armado, para qué pensar. Por otro lado, si no tengo ese tiempo de ocio, si no me aburro, entonces, probablemente no podría crear.
La ficción la veo como una posibilidad, entonces. Y el aburrimiento como el iniciador, el punto de partida para ir a la creación. Entiéndase creación como la búsqueda de una posibilidad, como la indagación, como el ejercicio para hallar nuevas respuestas a planteamientos comunes.

Sigo creando este texto a partir del uso de mi tiempo de ocio. El aburrimiento o el deseo de ocupar mi tiempo, sea o no un momento “aburrido”, me permite la introspección, la indagación sobre nuevas posibilidades, me permite no llenarme el espacio-tiempo con los enlatados que ofrece la tv o el medio al que prefieras exponerte. Y no estoy en contra de los medios, pues gracias a un medio llega este texto a ti, lector. Mi entusiasmo por los medios, justamente, me llevó a estudiar Ciencias de la Comunicación. Y como parte de esos estudios realicé entrevistas, reportajes, armé libros de investigación periodística y hasta participé de un programa radial que salía en vivo. Y todo gracias al aburrimiento. En una época también escribí para un medio periodístico que estaba en Internet.

Le debo mucho al aburrimiento. Sí. ¿Qué? Bueno, producto del aburrimiento son los siete libros que armé con cuentos, una novela, un relato de viaje, dos trabajos de investigación periodística, cinco blogs, y un montón de cuentos sueltos que no están publicados, otro grupo de ellos que aparecen publicados sueltos en sitios de divulgación de cuentos y revistas literarias. Y por otro lado están los audio-libros, los audios de las entrevistas, los reportajes en formato audio y algunos cortos audiovisuales en mi canal en You tube.

Cerrando este texto, simplemente, le doy gracias amigo lector, por ocupar su tiempo de ocio leyendo estas palabras que fueron surgiendo gracias al deseo de ocupar mi tiempo libre, y transformar mi aburrimiento en algo placentero. Al menos... para mí.

Walter H. Rotela G.
2020 –
En los tiempos del Coronavirus